Ricardo Ascensio organiza el primer tour pos-semáforo verde, el cual lleva a conocer el proceso del chile habanero a visitantes franceses.
La reactivación del turismo de experiencias arrancó formalmente este domingo, cuando un grupo de aproximadamente 50 franceses conoció de cabo a rabo cómo se produce el chile habanero y se transforma en salsas y mermeladas.
El turismo de experiencias es un turismo que se aleja de las rutas masificadas para obligarnos a adentrarnos en las cunas de las civilizaciones. Aquel turismo que nos lleva de la mano para que probemos recetas originales hechas de forma artesanal por habitantes de cabañas, o en los hornos de un pastelero del barrio en el que nunca alquilarías una casa. Un turismo que lleva a los viajeros a hacerse cursos de buceo, únicamente para conocer esa barrera de coral que ya no quiere ver a través de los cristales de un barco, sino que desea tocar con sus propias manos.
Esto es lo que ofrece el ingeniero Ricardo Ascencio Maldonado, dueño de la empresa Salsas Chicxulub, a los visitantes. El recorrido es verdaderamente una experiencia donde los turistas conocen cómo se planta el chile habanero, se cosecha y se vuelve productos consumibles.
En esta ocasión, fueron aproximadamente 50 viajeros europeos los que conocieron el proceso. Fueron recibidos por el Ascensio Maldonado, quien los condujo a un comedor donde probaron platillos yucatecos aderezados con las salsas.
“Este tipo de experiencias se perdieron con la pandemia. Por eso, buscamos rescatarlas y que los visitantes se lleven parte de nuestra cultura, de nuestra riqueza gastronómica, parte de nuestra tierra”, afirmó el empresario, único hasta el momento en volver a abrir esta brecha turística.
El también regidor del Ayuntamiento de Mérida señaló que esta orma de darles algo más a los visitantes está en boga en el mundo, pero en Yucatán se ha explotado poco.
“Con estas experiencias, los turistas dejan de serlo para volver visitantes, aventureros, y por un lapso de tiempo se vuelven yucatecos. Esto es para que además se vea que lo que se hace en Yucatán está bien hecho”, remató.
Señal{o que esperan que ahora que se dan las condiciones para que los visitantes lleguen en grandes cantidades, tengan de 3 a 6 camiones de turistas cada in de semana, como mínimo.
Cabe aclarar que son las agencias de viajes las que contratan el tour y no un particular, lo que hace que el servicio deba rayar en la perfección, pues cualquier falla causaría que no los consideren de nuevo.